Supongo que al eco de la localización de los restos del galeón San José, dos revistas de historia españolas se han lanzado a la publicación de sendos artículos sobre los pecios españoles. El tremendo ¿error? es que ambas hablan de “tesoros”, contribuyendo a perpetuar la imagen de que lo único importante del patrimonio sumergido es el oro y la plata.
Tampoco somos inocentes, a algún tipo de acuerdo habrá que llegar entre todos. No es realista pretendér que cientos de toneladas de oro y plata en forma de centenares de miles de monedas, todas ellas iguales, permanezcan en el fondo del mar. No es realista pretender que solo tienen un interés histórico. Solo, quizás, después de un detallado estudio arqueológico y mostrando el debido respeto al patrimonio, se debería considerar el valor económico de nuestros pecios. Pero si persisten en llamarlos “tesoros”, mal vamos.

